martes, 9 de junio de 2009

ITACA

Cuando empieces tu ida hacia Ítaca,
desea que el camino sea largo,
lleno de peripecias, lleno de conocimientos.

A los Lestrígones y a los Cíclopes,
al encolerizado Poseidón no temas,
tales cosas en tu camino nunca las encontrarás,
si tu mirada permanece alta, si una escogida
emoción a tu alma y a tu cuerpo les guía.

A los Lestrígones y a los Cíclopes,
al fiero Poseidón no los encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si tu alma no los coloca delante de ti.

Desea que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas estivales
en que con cuánta satisfacción, con qué alegría
entrarás en puertos por primera vez vistos.

Haz un alto en los mercados fenicios,
y adquiere hermosas cosas,
nácares y corales, ámbares y ébanos,
y sensuales perfumes de todas clases,
los más abundantes y sensuales perfumes que puedas.

Visita muchas ciudades egipcias,
aprende y aprende de los instruidos.
Siempre en tu mente ten a Itaca.

La llegada a allí es tu destino.
Pero no precipites el viaje en absoluto.
Es mejor que muchos años dure.

Y que, ya anciano, arribes a la isla,
rico con cuanto obtuviste en el camino,
sin esperar que riquezas te dé Itaca.
Itaca te dio el hermoso viaje.
Sin ella no hubieras emprendido el camino.

No puede darte nada más.
Aunque la encuentres pobre, Ítaca no te engañó.
Tan sabio como te has hecho, con tanta experiencia,
ahora ya habrás comprendido qué significan las Itacas.

lunes, 8 de junio de 2009

Gracias a la Vida

Esta es la letra de una hermosa canción interpretada por Violeta Parra.
Una canción de homenaje a la vida.
Una canción de gratitud,
de aquella que nos hace sentir
que vivir es la más maravillosa
experiencia que podamos disfrutar.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
graba noche y día grillos y canarios;
martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y el abecedario,
con él las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano,
y luz alumbrandola ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio el corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano;
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto,
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos, que es mi propio canto.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

domingo, 7 de junio de 2009

¿Qué es el éxito para uno de los hombres más poderosos del mundo?


Carlos Slim Helú, el hombre más rico de México y de América Latina, y un ejemplo
de claridad de pensamiento y de interés por el desarrollo económico y cultural del
país, opina sobre el éxito, en la revista Poder, de Noviembre del 2002.


Dice el magnate: "Yo creo que el éxito no está en lo económico.

Yo creo que una persona no es de éxito
porque le va bien en los negocios
o le va bien profesionalmente
o saca 10 en la escuela.
Creo que eso es lo que menos vale.

Lo que vale es tener los pies en la tierra,
la familia (el concepto de familia), los amigos.
Apreciar las cosas que tienen valor verdadero,
no material, no físico necesariamente".

El éxito no tiene que ver con lo que mucha gente
se imagina.
No se debe a los títulos nobles y académicos que tienes,
ni a la sangre heredada o la escuela donde estudiaste.

No se debe a las dimensiones de tu casa o de
cuantos carros quepan en tu garaje.
No se trata de si eres jefe o subordinado; o si eres
miembro prominente de clubes sociales.

No tiene que ver con el poder que ejerces o si
eres un buen administrador o hablas bonito,
si las luces te siguen cuando lo haces.
No es la tecnología que empleas.


No se debe a la ropa que usas, ni a los grabados que
mandas bordar en tu ropa,
o si antes de tu nombre pones las siglas
deslumbrantes que definen tu estatus social.
No se trata de si hablas varios idiomas,
si eres atractivo, joven o viejo.

El éxito... lo debes entender y apreciar
en cuánta gente te sonríe, a cuánta gente amas
y cuántos admiran tu sinceridad y la sencillez de tu espíritu.
Se trata de si te recuerdan cuando te vas.

Se refiere a cuánta gente ayudas, a cuánta
evitas dañar y si guardas o no rencor en tu corazón.
Se trata de que en tus triunfos
estén incluidos tus sueños.

De si tus logros no hieren a tus semejantes.
Es acerca de tu inclusión con otros,
no de tu control sobre los demás.

Es sobre si usaste tu cabeza tanto como tu corazón,
si fuiste egoísta o generoso,
si amaste a la naturaleza y a los niños

y te preocupaste de los ancianos.
El éxito se mide por tu bondad,
tu deseo de servir, tu capacidad de escuchar
y tu valor sobre la conducta.

No es acerca de cuantos te siguen,
sino de cuantos realmente te aman.
No es acerca de transmitir,
si no cuantos te creen si eres feliz o finges estarlo.

Se trata del equilibrio de la justicia
que conduce al bien tener y al bien estar.

Se trata de tu conciencia tranquila,
tu dignidad invicta y tu deseo de ser más, no de tener más.
De poseer riquezas no en tu bolsillo, sino en tu corazón. ESO ES EL ÉXITO !!!